Citando a Julian Katari del 14/02/2025, 2:22 pm

Chimalma

Me preguntaron a través de un mensaje en Instagram sobre la momia deificada que llevaban los aztecas, específicamente cuál era su nombre y dónde pueden investigar más. Después de responder que no hay un nombre escrito como tal, la mujer me preguntó si podría ser Chimalma, y ​​señaló el símbolo de Chimalma en el códice en el que le dije que se encuentra esta historia, la palabra significa "escudo de mano". Había escuchado el nombre antes en la historia sobre Quetzalcoatl, específicamente era su madre, quien después de recibir una flecha de Mixcoatl, un dios que representa la vía láctea, quedó embarazada del avatar tolteca.

Parece relevante y protector para hoy mientras trato de describir lo que está sucediendo, a lo que debemos prestar atención. El título que había elegido antes de este era trabajo de sombras, pero puede que sea demasiado amplio. Quiero centrarme en el hecho de que cuanto más nos permitamos desafiar las mentiras y el mal, más podemos ser atacados por ellos. Por el contrario, cuando nos dejamos llevar por la corriente dominante, que seamos sinceros, es malvada, más nos protege.

Los aztecas tomaron el liderazgo entre las otras tribus nahuatlacas y a través de la guerra sagrada se coronaron y crearon un imperio donde la antigua práctica del sacrificio humano era importante para mantener el equilibrio en el universo. Pero luego nuestra fuente para la historia del avatar de Quetzalcóatl, unos 700 años antes, nos dice que Se acatl topiltzin (quetzalcóatl) estaba en contra del sacrificio humano. El sacrificio humano era la corriente principal en Mesoamérica central, y no llegaré a calificarlo como malo, pero ciertamente era la corriente principal en ese entonces. Una corriente principal a la que Quetzalcóatl se oponía. Pero entonces, este huehuetlahtolli (lengua antigua) pudo haber sido influenciado por la intervención cristiana, así que realmente no lo sabemos.

Si descendemos al inframundo de los muertos y del pasado, todo es oscuro, es realmente difícil querer calificar algo como bueno o malo. Lo que sí es relevante es que nos persigue. Si nos fijamos en cómo nuestros antepasados ​​eran perseguidos por malos espíritus y energías, te sorprenderías mucho. ¡Era realmente malo! Las madres les decían a sus hijos que no salieran ciertos días porque sus almas podían ser tomadas por espíritus acosadores. Dejémoslo ahí para los ejemplos.

Hoy nos hemos vuelto, no sé, o más insensibles a estas cosas, o más fuertes y más protegidos ante ellas. Otra teoría sería que estos espíritus se han materializado. Hoy deberías sentirte protegido porque eso es lo que estoy invocando. De lo contrario, es una combinación que invita a las energías del inframundo a desafiarnos, y apuesto a que las has estado sintiendo, no solo hoy, tal vez incluso toda tu vida, y cada vez más recientemente.

Eso es porque ya no son solo espíritus. Es real, las patentes están ahí. La red 5G está armada y, en combinación con la IA y otras tecnologías, altera los campos de la Tierra y de los humanos, induciendo negatividad, alterando la intuición y destruyendo la armonía. Menos mal que estamos vivos y somos inteligentes, y es probable que hayamos desarrollado mucha resistencia a esto, naturalmente. Así que no hay necesidad de alarmarse, aunque sí tenemos que hacer algo al respecto, y un paso es reconocerlo como uno de estos espíritus que nos acechan y que realmente está aquí, zumbando en nuestro oído, induciendo pensamientos negativos, destruyendo las conexiones que hacemos con lo sutil. Así que la otra cosa buena es que, frente a esta realidad, siendo que la negatividad es tan fuerte -literalmente emitida de las antenas- entonces podría apostar a que nos hemos curado del miedo de los propios espíritus. Una vez que nos deshagamos de las antenas, o que elijamos alejarnos de ellas, ya no deberíamos estar atormentados por los espíritus y las energías malignas del pasado. Seremos tan fuertes y resistentes que podremos evolucionar para dejar de tener problemas con el mal.

Por cierto, me han dicho que la solución no llegará hasta que elijas participar en ella.