Círculo de palabra
3 Mihkistli
Citando a Julian Katari del 13/01/2025, 3:06 pm
Distancia Agradable
Hay una parte de nosotros en donde puede que nos quedemos estancados durante bastante tiempo y que es donde simplemente necesitamos tener un espacio apartado de todo. Queremos alejarnos de tantas cosas y es bueno hacerlo, terminar, irnos y tener silencio. Es un silencio de los demás porque en este espacio de aparente silencio es donde finalmente podemos escucharnos a nosotros mismos, nuestros pensamientos y, debajo de eso, los pensamientos y mensajes de nuestros antepasados y del mundo espiritual que nos habla constantemente. Así que nunca estamos realmente solos. De hecho, si queremos sentirnos menos solos, necesitamos ser capaces de crear este espacio y aprender a escuchar en el silencio todas las voces, todos los espíritus, todos nuestros pensamientos ruidosos. No poder distanciarnos del ruido es lo que, de hecho, nos pone ansiosos y nos hace sentir solos.
En el entrenamiento tolteca practicamos el distanciamiento de nuestros propios pensamientos y diálogo interno. Puedes apagarlo por unos segundos, pero no puedes suprimirlo constantemente. Lo que puedes hacer es sentarte más lejos de él, acostumbrarte a no identificarte con él, con lo que dice. Esto puede ser extraño, ¿cómo puedes no identificarte con lo que tú mismo estás pensando? Lo mismo ocurre con los sueños. ¿Nos atrevemos a ponernos en una mente verdaderamente vacía? Muchas bendiciones y sanaciones llegan cuando encontramos este espacio sagrado, cuando somos capaces de distanciarnos de nosotros mismos de una manera amorosa y controlada (la otra forma sería perder tu alma, o alejarte de tu cuerpo, no quieres eso).
El día de hoy nos permite estar cómodos con todo esto e incluso buscarlo. Es un gran ejemplo de cómo se siente la paz.
Distancia Agradable
Hay una parte de nosotros en donde puede que nos quedemos estancados durante bastante tiempo y que es donde simplemente necesitamos tener un espacio apartado de todo. Queremos alejarnos de tantas cosas y es bueno hacerlo, terminar, irnos y tener silencio. Es un silencio de los demás porque en este espacio de aparente silencio es donde finalmente podemos escucharnos a nosotros mismos, nuestros pensamientos y, debajo de eso, los pensamientos y mensajes de nuestros antepasados y del mundo espiritual que nos habla constantemente. Así que nunca estamos realmente solos. De hecho, si queremos sentirnos menos solos, necesitamos ser capaces de crear este espacio y aprender a escuchar en el silencio todas las voces, todos los espíritus, todos nuestros pensamientos ruidosos. No poder distanciarnos del ruido es lo que, de hecho, nos pone ansiosos y nos hace sentir solos.
En el entrenamiento tolteca practicamos el distanciamiento de nuestros propios pensamientos y diálogo interno. Puedes apagarlo por unos segundos, pero no puedes suprimirlo constantemente. Lo que puedes hacer es sentarte más lejos de él, acostumbrarte a no identificarte con él, con lo que dice. Esto puede ser extraño, ¿cómo puedes no identificarte con lo que tú mismo estás pensando? Lo mismo ocurre con los sueños. ¿Nos atrevemos a ponernos en una mente verdaderamente vacía? Muchas bendiciones y sanaciones llegan cuando encontramos este espacio sagrado, cuando somos capaces de distanciarnos de nosotros mismos de una manera amorosa y controlada (la otra forma sería perder tu alma, o alejarte de tu cuerpo, no quieres eso).
El día de hoy nos permite estar cómodos con todo esto e incluso buscarlo. Es un gran ejemplo de cómo se siente la paz.