Have a question?
Message sent Cerrar

Círculo de palabra

Por favor o Registro para crear publicaciones y temas.

2 Kuetzpallin

Amigo duende

Si no tienes uno, necesitas uno. Un amigo travieso y divertido que no encaje, que sea raro, diferente, dispuesto a ir en contra de las reglas, disponible para ti. Tal vez todos necesitemos ser así, crear una nueva alianza con los demás, estar dispuestos a ir en contra de las reglas, a no encajar y hacer lo que es mejor para nuestros seres queridos, no para la sociedad, el sistema o simplemente "los demás". La mayor parte del sufrimiento que veo en los demás proviene de intentar encajar. Declararse diferente es liberador, pero cuidado con las trampas. El sistema ha creado una miríada de arquetipos (e incluso diagnósticos) para ser diferente. Ser eso no es ser diferente, ser eso es volver a caer en la misma trampa. Eres único y diferente. No hay ningún signo, ningún arquetipo que te quede. El día de hoy nos invita hermosamente a divorciarnos de los catálogos existentes de ser, de los nombres con los que te llamas a ti mismo, de los nombres con los que llamas a los demás. Recuerda que atrapamos a los demás tanto como nos atrapamos a nosotros mismos. Piensa antes de darle un adjetivo a alguien, por mucho que le quede, está en tu poder cambiar eso, cambiarlo, simplemente no llamándolo así.

Hambre.

El hambre, el sentir hambre, es una poderosa fuerza transformadora que impulsa la vida. La necesidad de satisfacer las necesidades básicas para sobrevivir es innegable. Si lo interpretamos como un presagio, podemos encontrar problemas, carencias, caídas, roturas, pérdidas, ausencias o escasez en el nawal de hoy. Como toltecas, si la tomamos conscientemente con amor, podemos usar esta energía para fortalecernos ante los desafíos y aprender los misterios que se esconden tras la fuerza del hambre. Verás, a veces nuestra propia naturaleza, en este caso el impulso de encontrar lo que necesitamos, puede llevarnos a fracasar en la búsqueda. Es el universo, o la forma en que el nawal nos enseña a dominar nuestros impulsos naturales y a encontrar lo que necesitamos donde se encuentra. Cuando lo logramos, podemos sentir la necesidad, pero no actuamos impulsivamente. Detectamos el impulso y lo integramos en nuestra conciencia contemplativa. Si lo logramos, veremos que lo que necesitamos se encuentra en un lugar que jamás habríamos visto si hubiéramos actuado impulsivamente según nuestro primer impulso, motivado por el hambre. Es como el perro que se abalanza violentamente sobre la comida y la derrama toda del plato. Controlar el hambre no solo nos ayuda a satisfacer nuestras necesidades, sino que también puede sanarnos, como cuando ayunamos.

El mejor remedio que existe, capaz de curar cánceres y cualquier enfermedad aparentemente imposible, es el ayuno. La diferencia entre un ayuno sanador y un hambre dañina radica en cómo preparamos nuestra mente, en lo que le decimos a nuestro cuerpo antes de comenzar. Si no le decimos nada, el ayuno y el hambre pueden ser perjudiciales; debemos evitarlo. Por el contrario, si nos preparamos y le decimos a nuestro cuerpo que ayunaremos para sanar algo, eso es precisamente lo que sucederá. Esto demuestra el poder de canalizar con la mente y la consciencia el flujo natural de los cuerpos en la Tierra, cómo podemos dirigir mental y espiritualmente lo que ocurre en el plano físico. Este es un ejemplo de lo que el nawal de hoy puede brindarnos y una muestra del entorno transformador de la trecena Kalli.

¡Aloha!

Recibe nuestras entradas, contenidos, canalizaciones e información del Círculo directamente a tu buzón de entrada

Nunca te enviaremos spam ni compartiremos su dirección de correo electrónico con nadie.
Obtén más información en nuestra página de política de privacidad.