Miren cómo es que estamos todos en el mismo saco. Muchos de nosotros hemos estado perdiendo cosas, aparentemente, dinero, objetos, seres queridos, relaciones. Pero apuesto a que todos sentimos lo mismo, donde ha sido una ganancia, no una pérdida. Todo lo que hacemos y todo lo que sucede se traduce en algo, nada se pierde realmente. Con esta fórmula, nunca creceríamos, porque damos, perdemos, pagamos y todo eso regresa a nosotros de otra manera, pero nunca hay una ganancia, y la hay.
La ganancia es todo este amor que hemos estado cultivando, porque eso es exactamente lo que ustedes han estado haciendo. No hemos estado cayendo en la tendencia de cautivar audiencia impulsada por la IA, sino al contrario, la economía del salmón, nadando contra la corriente, encontrándonos unos a otros aunque se haga el esfuerzo para que no lo hagamos. Eso es por el espíritu, porque lo hemos encontrado, y por el amor, hemos sido valientes para cultivarlo, empezando por amarnos a nosotros mismos. Hoy debería ser una demostración de eso. Deberíamos ver señales apareciendo por todas partes que indican que, a pesar de todo el sufrimiento, toda la destrucción, todos los obstáculos, el amor ha estado prosperando.
Abundancia de amor
Miren cómo es que estamos todos en el mismo saco. Muchos de nosotros hemos estado perdiendo cosas, aparentemente, dinero, objetos, seres queridos, relaciones. Pero apuesto a que todos sentimos lo mismo, donde ha sido una ganancia, no una pérdida. Todo lo que hacemos y todo lo que sucede se traduce en algo, nada se pierde realmente. Con esta fórmula, nunca creceríamos, porque damos, perdemos, pagamos y todo eso regresa a nosotros de otra manera, pero nunca hay una ganancia, y la hay.
La ganancia es todo este amor que hemos estado cultivando, porque eso es exactamente lo que ustedes han estado haciendo. No hemos estado cayendo en la tendencia de cautivar audiencia impulsada por la IA, sino al contrario, la economía del salmón, nadando contra la corriente, encontrándonos unos a otros aunque se haga el esfuerzo para que no lo hagamos. Eso es por el espíritu, porque lo hemos encontrado, y por el amor, hemos sido valientes para cultivarlo, empezando por amarnos a nosotros mismos. Hoy debería ser una demostración de eso. Deberíamos ver señales apareciendo por todas partes que indican que, a pesar de todo el sufrimiento, toda la destrucción, todos los obstáculos, el amor ha estado prosperando.
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