Mientras me siento a escribir esto todos los días, pensando qué escribiré, a mi gata joven le gusta sentarse a mi lado en el sofá y jugar con mi mano. Normalmente es muy agresiva, nunca se rinde y siempre responde a mis ataques. Hoy, sin saber exactamente qué escribir, me mostró. Mientras intentaba atacarla, se puso panza arriba y por primera vez en su vida, simplemente se rindió.
Los días Oselotl nos enseñan a permanecer en silencio, esperar y ser pacientes, pero no a rendirnos del todo ni dejar ir. La energía del once lo pronuncia y esta interpretación es bastante acertada. Si damos continuidad a lo que hemos estado aprendiendo del proceso de los días anteriores, aprendemos que incluso en el entrenamiento y aprendizaje más disciplinado, donde estamos obligados a seguir y hacer lo que es sagrado, podemos y debemos, algunos días, simplemente rendirnos, dejarnos llevar. Esto o aquello no se puede hacer, no ahora. Este proceso es importante, este descanso, este espacio, esta aparente negatividad.
Es parte de la maduración del espíritu lo que realmente hará que suceda lo que queríamos. Si asistimos a este proceso, recibiremos una señal. Dejar de lado lo que creíamos que era el camino correcto puede hacer que surja un camino mejor.
Soltar
Mientras me siento a escribir esto todos los días, pensando qué escribiré, a mi gata joven le gusta sentarse a mi lado en el sofá y jugar con mi mano. Normalmente es muy agresiva, nunca se rinde y siempre responde a mis ataques. Hoy, sin saber exactamente qué escribir, me mostró. Mientras intentaba atacarla, se puso panza arriba y por primera vez en su vida, simplemente se rindió.
Los días Oselotl nos enseñan a permanecer en silencio, esperar y ser pacientes, pero no a rendirnos del todo ni dejar ir. La energía del once lo pronuncia y esta interpretación es bastante acertada. Si damos continuidad a lo que hemos estado aprendiendo del proceso de los días anteriores, aprendemos que incluso en el entrenamiento y aprendizaje más disciplinado, donde estamos obligados a seguir y hacer lo que es sagrado, podemos y debemos, algunos días, simplemente rendirnos, dejarnos llevar. Esto o aquello no se puede hacer, no ahora. Este proceso es importante, este descanso, este espacio, esta aparente negatividad.
Es parte de la maduración del espíritu lo que realmente hará que suceda lo que queríamos. Si asistimos a este proceso, recibiremos una señal. Dejar de lado lo que creíamos que era el camino correcto puede hacer que surja un camino mejor.
Sign In
The password must have a minimum of 8 characters of numbers and letters, contain at least 1 capital letter